Sociedad

Nos pasamos la vida en sus jaulas de cemento. Nos enseñan normas, nos enseñan que siempre habrá alguien superior a nosotros, y que no obedecerlos significará tu caída.
Nos enseñan como pensar, y como esponjas absorbemos todo lo que nos dicen. Para asegurarse de que siempre estará grabado a fuego en cada una de nuestras neuronas, nos obligan a repetir las mismas lecciones durante horas para luego superar sus propias pruebas.
Somos marionetas de una sociedad invisible, e incluso cuando pensamos que descansamos, la publicidad nos bombardea provocándonos sentimientos, inseguridades y complejos, diciéndonos lo que está bien y mal, lo que debemos desear.

Nadie se libra de la horca de la vida, pero... ¿sabrás aguantar la respiración? El taburete ya ha caído, ahora tú decides.