sábado, 26 de enero de 2013

Vacíos.

Con aíre melancólico, se deslizó poco a poco hasta la playa mientras yo la observaba. Era hermosa, muy hermosa, y sus cabellos ondeaban al ritmo del viento en una sinfonía que solo ella parecía entender.
Se sentó sobre la cálida arena, y con sus ojos claros y vacíos miró al horizonte, al mar, los pájaros, el sol poniente y las nubes grises que prometían tormenta.
Éste nunca fue un mundo para ti, pequeña.
Miraba sin ver el paisaje azul. Ya no escuchaba las olas chocar, ya no era capaz de oler el mar. Simplemente estaba allí, sola, sentada, esperando a que algo ocurriese.
-¿Sabes? Siempre lo supe. Siempre supe que ésta historia no tendría final. Fue su historia y la mía, pero nunca dejé que fuera "nuestra", dolía demasiado.
Unas tímidas lágrimas comenzaron a rodar por su mejilla. El viento soplaba fuerte, arrancándonos un leve suspiro, despertando sentimientos, robándonos recuerdos.

Solo eramos espectadoras de nuestra vida. Simples ojos que vislumbran desde fuera el paso del tiempo y sin poder hacer nada para cambiar nuestro destino.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Datos personales

Mi foto
No, no tengo las cosas claras, y no quiero tenerlas. Quiero vivir el día a día, e improvisar. Quiero ganar y perder en esta vida, pero sobre todo, quiero disfrutar de cada día como si fuera el último,... el último día de los muchos que me quedan. Me llamo Andrea, y tengo 15 años. Según el momento, puedo ser madura o inmadura, porque no suelo pensar en el futuro. De pequeña bebía café descafeinado porque me sentía mayor, y ahora me encanta, al igual que me gusta saltar en los charcos o cantar en la ducha. Escribo este blog, porque me gusta escribir todo lo que no puedo gritarle al mundo. Espero que lo disfrutéis :)

Flickr

Blogger templates

Search